Centrarse en los esfuerzos más que en los resultados
Nuestro entorno nos condiciona a dar mucha importancia a los resultados y esto no es una excepción en el pádel, donde la mayoría de los jugadores sólo se centran en su clasificación, en ganar un partido o en realizar golpes brillantes.
Estos objetivos no son suficientes para rendir bien en los partidos y suelen ser contraproducentes, lo he vivido como jugador.
En este artículo, te doy un consejo mental esencial para ayudarte a gestionar mejor tus partidos de pádel: no te centres en tus resultados, sino en los esfuerzos que tienes que hacer para conseguirlos.
¿Por qué la clasificación y la victoria no son objetivos suficientes?
La mayoría de los jugadores tienden a centrarse únicamente en su clasificación y en el resultado de los partidos, ganados o perdidos.
Nos centramos en estos objetivos porque son fácilmente medibles y porque es natural considerar el resultado final de lo que estamos haciendo.
También se tiende a dar demasiada importancia a la opinión de los demás sobre nuestros resultados.
La evaluación por resultados también es un hábito que tenemos en general:
- en la educación, donde se nos evalúa por las notas (aunque haya evoluciones en este campo)
- en simples discusiones entre jugadores en las que simplemente nos preguntamos el resultado de nuestros partidos sin ir más allá
No es vergonzoso tener objetivos en términos de clasificación y es natural querer ganar tus partidos, pero no debes limitarte a estos objetivos.
¿Por qué no?
Por un lado, porque estos objetivos están «fuera de control«.
No es porque decidamos tomar 2 clasificaciones esta temporada que estamos seguros de tener éxito.
Del mismo modo, sea cual sea el partido que tengamos que jugar y la clasificación del rival, sabemos que puede pasar cualquier cosa y que siempre podemos perder.
Centrarse en objetivos que no se controlan al 100% es una fuente de estrés.
Por otro lado, para ganar un partido de pádel, es inútil pensar en ganar o perder y en el impacto que tendrá en la clasificación.
Ganar no es suficiente para determinar que se ha hecho un buen partido: se puede ganar jugando mal y se puede perder dándolo todo y jugando bien.
Hay que evaluar los partidos mirando más allá de la victoria y la derrota.
Concéntrese en lo que controla en un partido de pádel
Para rendir bien en un partido de pádel, para reducir el estrés, aumentar la confianza, evitar estar demasiado tenso en los puntos importantes y divertirse jugando, hay que centrarse en las cosas que están 100% bajo tu control.
Establece objetivos que sean personales para ti, que te permitan evaluar tu juego y el de tu compañero tanto si ganas como si pierdes.
Estos son algunos ejemplos de cosas que seguramente podrás hacer en un partido, si te obligas a hacerlas:
- simplemente haz lo mejor que puedas, física, mental y tácticamente
-
- Jugar bien tácticamente depende de la pareja:
- utilizad vuestros puntos fuertes
- para los rematadores, es fundamentar que estén bien colocados
- para los defensores, oblíguese a ser agresivo
- y así sucesivamente.
- Físicamente: mover bien las piernas, ser dinámico, hacer bien las dobles posturas
- Mentalmente: sé positivo, no te critiques a ti mismo, no critiques el juego del adversario, no seas derrotista, no culpes a los elementos externos (juego del adversario, campo, balón, viento, sol, etc.), ¡se necesita esfuerzo!
- incluso mejor que jugar punto por punto, jugar balón por balón
- el objetivo de su concentración es el siguiente tiro a realizar
- si piensas en otra cosa, es un pensamiento parásito
- el problema es conseguir volver a centrarse en el punto que se va a jugar cuando las cosas se tuercen, ahí es donde hay que esforzarse y ahí es donde la mayoría de los jugadores se «rajan» mentalmente y pierden los buenos propósitos que tenían antes del partido
- utilizar la respiración para relajarse
- no pensar en su técnica
- ver cada partido como un paso en el progreso, no como un fin en sí mismo, no como una evaluación de nuestro nivel de juego.
Esta lista depende de cada persona. Hay elementos que pueden ser comunes a todos los jugadores y otros que dependen exclusivamente de ti, de tus puntos fuertes y débiles.
Para lograr este estado de ánimo, necesitarás :
- motivación,
- estar convencido al 100% de que así progresarás y disfrutarás de tus partidos,
- paciencia,
- ser capaz de ver más allá del partido que tienes que jugar, considera que un partido no es un final sino sólo un paso en tu progreso,
- pensar en los resultados a largo plazo,
- desprendimiento de los ojos de los demás.
Después del partido
Después del partido, tanto si has ganado como si has perdido, evalúa tu partido en función de los objetivos que te has marcado.
¿Lo diste todo en cada punto del partido?
¿Se atrevió a atacar cuando tenía que hacerlo?
¿Se obligó a seguir siendo positivo y combativo en cada balón?
etc.
Si ha ganado sin respetar estos objetivos, es una victoria a medias.
Perdido respetando tus objetivos, es una victoria, ¡hay que verlo así!
Si has ganado respetando tus objetivos, has conseguido dos victorias: has ganado el partido y has conseguido una victoria sobre ti mismo.