Ya sea en la preparación del partido, en el aspecto mental, en el aspecto táctico, en el análisis de nuestros partidos cuando terminan, ¡no faltan oportunidades para cometer errores que nos impidan progresar!
Aquí tienes una lista de consejos que NO debes seguir si quieres tener éxito en tus partidos.
He probado muchas de ellas sin querer pero no la lista completa, otros jugadores también son una buena fuente de inspiración y ¡no se pueden tener todos los defectos!
No practiques (o practica demasiado).
Para perder un partido, no practiques. Puede que llegue con pocas expectativas de resultados, pero puede que haya algunos errores no forzados.
Otra posibilidad es caer en la trampa contraria y entrenar en exceso.
En este caso, llegará cansado física y mentalmente y no tendrá muchas ganas de jugar.
Comer demasiado sin darse tiempo para digerir.
¿Y si comes un buen chucrut una hora antes de tu partido? ¿O quizás un cuscús, una raclette, una tartiflette? ¿Tal vez los cuatro juntos?
Se termina con unas lonchas de queso y un postre ligero como profiteroles de chocolate.
Todo esto sin beber un vaso de agua, por supuesto.
No hay que tener en cuenta las 3 horas de retraso entre el final de la comida y el comienzo del partido.
Normalmente, después de 2 o 3 viajes al campo, te sentirás mal.
¡Haz cualquier cosa con tu sueño!
Dormir lo suficiente en calidad y cantidad es esencial para estar en forma.
Si quieres perderte los partidos, duerme poco o varía tus horarios para acostarte y levantarte.
Exceso de énfasis en los resultados
Si se pone demasiado énfasis en los resultados en lugar de en el esfuerzo y la actitud, aumenta el estrés, el miedo a los errores y se reduce la disposición a asumir riesgos.
También se piensa mucho en la puntuación, en la clasificación del adversario y en la opinión de los demás.
¡Perfecto para un juego podrido!
Déjese impresionar.
¿Te impresiona todo esto?
- una pareja con un rango superior al tuyo
- una pareja que acaba de ganar sus partidos anteriores con facilidad
- una pareja que está haciendo una buena temporada
¡Perfecto! Ya partes con una pequeña desventaja para tu partido.
¡No calientes!
Si calientas 15-20 minutos antes de salir al campo, corres el riesgo de empezar bien el partido, ¡no cometas este error!
Lo mismo ocurre con el calentamiento de 5 minutos antes del partido, ¡no lo hagas!
Comete el mayor número de errores posible, no alargues el rally, juega el punto como lo harías en un partido, de esta manera no estarás calentado y aumentarás el riesgo de lesión.
¡No seas táctico!
La mejor manera de perder un partido es no tener táctica.
Si decides tener un plan de juego, no lo bases en tus puntos fuertes.
Haz cosas que no se te den bien, que no hagas nunca.
Si tus tácticas funcionan, cámbialas y si no funcionan, no cambies nada.
Cuando cambies de táctica, no es necesario que pruebes más de 3 puntos, es suficiente, ¡no esperes 3 o 4 partidos!
¡Olvídate de cambiar de lado!
¿Cambios de lado? ¿Qué sentido tiene? No tienes tiempo para eso.
¡No te hidrates! ¡No comas! No te relajes, respira tranquilo y no revises tus tácticas.
Si acaso, haz flexiones y salta a la cuerda para entrar en calor.
Criticar todo y a todos.
Tener una actitud negativa es bastante eficaz para perder partidos.
Criticarse a sí mismo si se comete algún error, ¡e incluso si se hacen puntos ganadores! Tal vez podrías haberlo hecho aún mejor.
Criticarse a sí mismo es un buen comienzo, pero no se detenga ahí.
Critica también al adversario, con su insoportable estilo de juego que te hace jugar mal y te impide disfrutar del partido.
Utiliza el lenguaje corporal negativo.
¿El partido es difícil y te sientes un poco desanimado?
¡Muéstralo!
- Arrastra los pies,
- baja la cabeza,
- lamentar,
- quejarse en voz alta.
¡Todo esto contribuirá a bajar tu moral y a dar confianza al adversario!
Piensa en todo menos en el momento.
Piensa en los errores tontos que has cometido hace unos minutos, piensa en lo que podría pasar si el partido continúa de la misma manera.
Piensa en todo menos en el momento presente y en el siguiente punto que tienes que jugar.
De este modo, aumentarás tu ansiedad y no te centrarás en lo único importante: la pelota y dónde quieres enviarla.
No analices vuestros partidos.
No pierdas el tiempo analizando tus partidos y sobre todo tus derrotas.
Seguramente no hay nada que aprender de una derrota, ya que has perdido y el partido ha sido especialmente malo.
Intentando encontrar las pocas cosas positivas que sucedieron y comprendiendo tus errores, podrás progresar y no cometerlos en los próximos partidos.